Al igual que ocurrió con los teclados mariposa y con los cargadores que solían venir incluidos con los iPhone, la Touch Bar de los MacBook parece estar condenada a desaparecer. No es que fuese una característica completamente inútil, pero su diminuto tamaño le impedía alcanzar su verdadero potencial. Si vas a colocar una pantalla sobre el teclado, deberás ir a tope con ello. Y eso es justo lo que hace el “Ficihp” (sí, ese es su nombre real).
Aunque este curioso invento parezca una extraña combinación entre portátil y tablet, el teclado no contiene ningún componente real de un ordenador. Por sí solo, es inútil. Pero cuando lo conectas por cable a un ordenador o a un dispositivo móvil compatible con pantallas externas actúa como si fuese un compacto teclado mecánico de 71 teclas con una pantalla táctil HD a color de 12,6 pulgadas y resolución de 1920×515.
A diferencia de la barra táctil del MacBook, cuya capacidad de personalización se veía limitada por la forma en que funcionaban las aplicaciones con ella, la pantalla de este teclado actúa como si fuese una pantalla secundaria de un portátil o de un sobremesa, por lo que los usuarios pueden mover cualquier aplicación o barra de herramientas que deseen ahí. La capacidad de tener accesos directos táctiles a herramientas o funciones que usas mucho en aplicaciones como Photoshop era un posible uso muy tentador, pero ahí es donde la TouchBar de Apple fracasó. Y este dispositivo podría cumplir justo con lo que muchos buscaban.
El Ficihp también se podría utilizar para otras cosas bastante útiles. Por ejemplo, podrías usar la pantalla del teclado para tomar notas durante una videoconferencia, dejando la pantalla principal para ver al resto de participantes. O podrías simplemente usar esta pantalla secundaria para tener abierto tu feed de Twitter. Quién soy yo para juzgarte.
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El teclado tampoco se queda atrás. Cuenta con brillo ajustable, teclas intercambiables y retroiluminación RGB con hasta 15 patrones de iluminación incorporados diferentes. También tiene N-key rollover, por lo que debería ser bueno para jugar.
El hardware tiene también algunas limitaciones. La única conexión real a un dispositivo es a través de un puerto USB-C, por lo que si tienes un PC o un portátil algo más antiguo deberás hacerte con un adaptador para conectar los dos entre sí. Y aunque la pantalla táctil admite hasta 10 puntos de detección táctil, eso solo funciona cuando está conectado a un PC con Windows. Cuando se combina con un Mac, la detección táctil se ve limitada a un solo punto.
Sin embargo, el mayor problema podría ser su precio: 390 dólares. Podrías encontrar fácilmente una pantalla externa de más definición y mucho más grande y comprarte además un teclado mecánico pasable por menos dinero que esto. Así que ya depende de ti ver si esa pequeña barra táctil te merece la pena o no el desembolso.